lunes, 11 de noviembre de 2019



EVO, PLATÓN Y HEGEL

Por Juan Carlos Lázaro

Cayó Evo Morales en Bolivia. Lo expectoró del poder una rebelión ciudadana decidida a hacer respetar sus derechos democráticos. No fue una rebelión de derecha. Tampoco  de izquierda. Ni de centro. Esa protesta la han protagonizado tanto la oposición como los ciudadanos de a pie. Solo los dogmáticos de izquierda, que observan estos hechos con anteojeras, ven en ese movimiento de protesta ciudadana una conspiración derechista o del imperialismo. Con las mismas anteojeras creen ver en la crisis chilena una avanzada izquierdista. Están equivocados. No me cabe duda que Morales cumplió en su primera etapa en el poder un papel importante en la recuperación del país altiplánico. Con él Bolivia se estabilizó y creció económicamente. Se redujo la pobreza. Se ensanchó la clase media. Tal vez estos éxitos –y los consejos de los franeleros de su entorno– lo hicieron sentirse un ser providencial, mesiánico, indispensable. Y entonces empezó a transitar el ilegal camino de las reelecciones. Agotó tres periodos presidenciales. No le bastó. Bien dice el lugar común que el poder corrompe. Llegó a controlar, además del Ejecutivo, el poder judicial, el tribunal electoral y la mayor parte de la prensa. Recién va a saberse la cantidad y el tamaño de sus delitos. Decidió hacerse reelegir por cuarta vez aunque la Constitución –de su propia hechura– se lo prohibía. Morales recurrió al referéndum. Fue derrotado en toda la línea. Aun así, mediante una desvergonzada leguleyada, se hizo habilitar para una cuarta reelección. Y cuando reparó que los votos le eran adversos, alteró su conteo durante 24 horas para acomodarlos a su favor. La indignación ciudadana respondió a tanto atropello con una rebelión popular. Ahora el país está sumido en la anarquía y al borde de la guerra civil. Ya lo dije: Bolivia le debe importantes avances a Morales, pero ello, de ninguna manera, podía ser razón para que él se zurre en la voluntad popular, en la Constitución y en la ley. La autoestima de los ciudadanos, lo dijo Platón, es tan importante como la razón y el deseo. Y para Hegel, este factor, el de la autoestima, es el motor oculto, subjetivo, de las revoluciones. Es el que hace que en algún momento el esclavo atente contra su amo que lo ha humillado por siempre aunque éste le haya dado techo y comida. Pero Morales no sabía nada de Hegel ni de Platón.

jueves, 7 de noviembre de 2019

Los cuatro 1989

RACHEL TAUSENDFREUND |Tomado de Política Exterior N° 192 | Nov-Dic. 2019
Treinta años después de 1989, Occidente aún no está seguro de cómo celebrar el aniversario, ni siquiera de qué acontecimientos debe conmemorar. La victoria de la democracia y la libertad no fue tan inequívoca.
En la actualidad, son muchos los que celebran lo sucedido en 1989. El problema es que en Estados Unidos y Europa occidental se recuerda mal. Es así, en parte, porque están equivocados respecto a lo que sucedió aquel año, o al menos son culpables de simplificar demasiado las cosas.
No hubo una sola historia en 1989; hubo cuatro. Y sus legados llegan hasta nuestros días, 30 años después, cuando la suerte de la democracia liberal en el mundo, incluso dentro de las sociedades occidentales, resulta mucho menos clara de lo que parecía entonces.

El 1989 de Occidente

Lo que ocurrió en Europa del Este entre 1989 y 1990 no iba sobre la caída de un muro: se trataba de una revolución política pacífica a gran escala. Una revolución que sustituyó el Estado autoritario comunista –ese gobierno que trataba como vasallos a sus ciudadanos– por una democracia nacional. En nuestra versión reducida de los hechos, se obvia a los protagonistas de la historia y solo se habla de la caída en sí.
La otra cuestión que percibimos de manera errónea en esta versión de 1989 es que no fue, como afirmaba la Estrategia de Seguridad Nacional de EEUU en 2002, una “victoria decisiva”. Occidente no derrotó al comunismo: resistió ante él, lo eclipsó y lo sobrevivió. El comunismo no fue derrotado por un presidente desde Washington; se desmoronó porque fracasó. El comunismo no fue capaz de proporcionar paz y bienestar a sus ciudadanos.
Ahora que nuestras sociedades occidentales luchan contra la creciente desigualdad y el descontento social, y somos incapaces de abordar los asuntos más apremiantes de nuestro tiempo –como la migración y el cambio climático, entre otros–, haríamos bien en reajustar en nuestra memoria cómo se “ganó” la guerra fría al bloque comunista.

El 1989 de Pekín

Hubo muchas protestas en favor de la democracia en 1989, pero no todas acabaron de manera pacífica. Pocas horas después de la primera vuelta de las primeras elecciones libres en Polonia (y en toda la Europa soviética), los tanques irrumpieron en la plaza de Tiananmen en Pekín para aplastar a los estudiantes allí manifestados. Aquella era su última y mayor concentración, después de meses de protestas masivas que ponían en solfa la legitimidad del Partido Comunista Chino (PCCh). El mundo pudo ver cómo miles de ellos resultaban heridos y al menos varios centenares eran asesinados aquel 4 de junio. Por entonces, las imágenes de los estudiantes enfrentados a los tanques resultaron tan icónicas como las de quienes celebraban en el muro de Berlín. Solo tiempo después se impuso un relato más optimista de 1989, que condicionó las expectativas de Occidente sobre China.
Los responsables políticos occidentales estaban tan enfrascados en la marcha firme de la democracia que anunciaba la Polonia de 1989, que no supieron ver que el Pekín de 1989 había dejado marcas profundas y duraderas. Como señala Gideon Rachman en Financial Times, “fue Tiananmen lo que aseguró el poder del PCCh, confirmando así que la potencia emergente del siglo XXI sería una autocracia, no una democracia”. Además, como afirma el experto en China Janka Oertel, el “shock de Tiananmen” ha definido la manera en que el PCCh se mantiene en el poder desde entonces, al prevenir nuevos desafíos proporcionando prosperidad económica y prohibiendo con firmeza la disidencia pública.
La razón por la que el 1989 de Pekín es tan importante para nuestro mundo es que China triunfó donde debería haber fracasado, y porque ese triunfo fue excepcional. Se creía que las reformas económicas sin reformas políticas eran imposibles. Varios presidentes de EEUU y otros líderes occidentales dieron por sentado que una economía abierta conduciría necesariamente a una sociedad abierta. Como George W. Bush dijo en 2000 sobre la incorporación del gigante asiático a la Organización Mundial del Comercio (OMC), “el comercio con China promoverá la libertad. La libertad no se contiene fácilmente. Una vez permitida una medida de libertad económica, seguirá una medida de libertad política”. Pero resulta que la libertad política no llegó a China. Y ni siquiera la era de la información cambió esto. Al contrario: Pekín cuenta ahora con un imponente Estado-vigilante fortalecido por la Inteligencia Artificial.
Para empeorar las cosas, las reformas económicas tampoco se materializaron. Tras 19 años, la entrada de China en la OMC no ha redundado en una sociedad o una economía más abiertas. En cambio, su economía, que no es de mercado sino conducida por el PCCh, ha prosperado como nadie imaginó. La economía china es hoy tan gigante y exitosa que es más probable que acabe con el sistema antes que ser reformada por él.
Por tanto, el 1989 de Tiananmen ha demostrado ser duradero y exitoso. Mientras la influencia de China en el mundo aumenta, también lo hace el mensaje que deja este otro relato alternativo de protestas.

El 1989 de Internet

En los primeros años de lo que pronto sería conocido como la World Wide Web, el “utopismo tecnológico” –por citar a Karen Kornbluh– en torno a la nueva tecnología se alineaba con el optimismo eufórico sobre una “nueva era” democrática.
Hacia 1989, un nuevo horizonte asomaba para esta red de comunicación digital descentralizada que comenzó, en la década de los sesenta, como un proyecto militar para permitir la comunicación en caso de desastre nuclear. Ese año, el primer acceso telefónico comercial conectó a usuarios particulares con Internet, dando carpetazo a los inicios de Internet primero como red para uso militar y luego académico (Arpanet, precursor militar de la red, fue desmantelado oficialmente en 1990). Allá por 1990, los arquitectos de la política inicial de Internet eran un grupo reducido. Treinta años después, la web y las redes sociales se han erigido como actores capitales en nuestras vidas e, incluso, como hemos aprendido hace bien poco, intervienen en nuestras elecciones y democracias.
Dada su estructura descentralizada, Internet fue visto como una fuerza abierta, democrática, equilibradora del poder. Y en sus primeras décadas se puede decir que así fue. Las personas conectaban directamente entre sí gracias al correo electrónico o los chats, mientras creaban sus propias páginas y blogs.
Pero Internet se volvió más centralizado y capital para nuestras vidas. Cada vez la vida es más online, y esta vida digital está dominada por unas pocas compañías de gran tamaño que controlan la experiencia del usuario. Los algoritmos diseñados para mantenernos enganchados más tiempo determinan lo que vemos en nuestros resultados de búsqueda y en nuestros timelines. Incluso las noticias nos llegan a través de (y filtradas por) dichas plataformas, mientras en paralelo Internet destruye el modelo de negocio del cuarto pilar de la democracia. Por tanto, en vez de la herramienta ciudadana, impulsada de abajo arriba, complemento de los medios tradicionales que prometía el primer Internet, hoy nos enfrentamos a unos medios de comunicación serios en dificultades y a una propaganda masiva impulsada por bots. Como escribe Kornbluh en Foreign Affairs, “propagandistas y extremistas deseosos de ocultar su identidad pagan publicidad segmentada y crean ejércitos de bots en redes sociales para promover contenidos engañosos o directamente falsos, hurtando a los ciudadanos un conocimiento básico de la realidad”.
Los ciudadanos de las democracias no son los únicos para los que Internet ha fallado como una clara fuerza de libertad. En 2011 aún celebrábamos la primavera árabe como una revolución surgida de las redes sociales, heraldo del poder de la tecnología para socavar a los dictadores. Pocos años después, como apunta Laura Rosenberger, investigadora del German Marshall Fund, los poderes autoritarios han aprendido a aprovechar la tecnología “para el control y la manipulación, desarrollando herramientas para restringir, vigilar y moldear de manera insidiosa las opiniones de la ciudadanía mediante el uso de la información y la tecnología, reforzando así su poder”. China, en concreto, ha logrado crear un Internet nacional censurado y plataformas y aplicaciones que permiten al PCCh rastrear las actividades en la red de los usuarios, mediante una vigilancia que, gracias a la IA, puede rastrearlos también fuera de la red. Y Pekín exporta cada vez más a otros países los “sistemas tecno-autoritarios de vigilancia y control” que ha desarrollado y empleado en casa.
Así que, 30 años después de que el Internet moderno comenzase a tomar forma, existe una lucha imprevista sobre su futuro. Lo que hoy podemos vislumbrar es que los futuros prometedores no llegan por decreto: Internet y otras tecnologías solo serán simpáticas a la democracia en la medida en que nosotros las hagamos así.

El 1989 de Yugoslavia

Al contrario que en Europa central, sobre Yugoslavia no existía el yugo soviético, y el comunismo de Tito proporcionó mayores libertades. Aún más, en 1989 las reformas políticas llevaban en curso más de una década. Pero otras fuerzas estaban surgiendo en aquel Estado multinacional. Slobodan Milosevic fue elegido presidente de Serbia en mayo de 1989 y, poco después, pronunció su célebre (e infame) discurso etno-nacionalista bajo el monumento de Gazimestan en Kosovo. Milosevic no estaba solo; de hecho, como apunta Paul Hockenos, “la mayoría de los yugoslavos acogieron con agrado los nuevos espacios e ideas que emanaron de la fachada comunista que se agrietaba, como la libertad de identificarse sin reservas con la propia etnia, ya fuera serbia, croata, musulmana, eslovena, montenegrina, macedonia o albanokosovar”.
Todos sabemos lo que vino después: Eslovenia y Croacia se opusieron al centralismo político de Milosevic y, en 1991, declararon su independencia, lo que originó la primera de una serie de guerras territoriales y conflictos étnicos que se extendieron durante una década, destruyeron Yugoslavia y acabaron con cerca de 130.000 vidas.
El etno-nacionalismo que devino violento en Yugoslavia fue un rasgo más definitivo de aquel 1989 de lo que reconoce nuestro relato simplificador. Branko Milanovic, economista serbo-americano, sostiene que las revoluciones de 1989 deberían ser vistas como “revoluciones de emancipación nacional, el último episodio de largos siglos de lucha por la libertad, y no como revoluciones democráticas per se”. En Polonia, Alemania y Checoslovaquia, durante las revoluciones de 1989 “fue fácil fusionar” nacionalismo y democracia. “Incluso a los nacionalistas más extremos les gustaba emplear el lenguaje de la democracia porque les otorgaba mayor credibilidad internacional, ya que parecían luchar más por un ideal que por intereses étnicos particulares”, añade Milanovic.
En Yugoslavia, el etno-nacionalismo sofocó cualquier indicio de democracia a medida que los acontecimientos se desarrollaron de manera muy distinta a como hicieron los países de Europa central. Como resultado, en nuestro relato de 1989, Yugoslavia era una anomalía, una nota al margen regional. Pero, ya en 2019, la llamada del nacionalismo ha resultado imposible de obviar, desde la Hungría de Víktor Orbán a los seguidores del Brexit que piden la autodeterminación británica, así como a Donald Trump y su America First.

La compleja historia de 1989

La admirable y cautivadora revolución polaca, la caída del Muro, el colapso pacífico del régimen soviético en Europa deberían celebrarse en este 30 aniversario. ¡Cómo no! Pero este relato nunca ha sido el auténtico. Fue, como señala Damir Marusic, editor de The American Interest, “un relato exitoso” que “capturó verdades esenciales sobre el tiempo que buscaba describir. Y como todas las buenas historias bien contadas, elige centrarse en algunas cosas en lugar de en otras”.
En cualquier caso, los hechos que quedaron fuera de nuestro relato original de 1989 también contienen verdades esenciales que nos pueden ayudar a comprender mejor los retos de hoy; por ejemplo, haciéndonos al mismo tiempo más humildes y menos desesperados. La victoria de la democracia y la libertad en 1989 no resultó tan inequívoca y robusta como nuestro relato original nos hizo creer, ni el futuro tan claro. Pero ahora que nos encontramos en un futuro más difícil, no deberíamos sucumbir a las tentaciones del pesimismo cultural, como advierte Thomas Kleine-­Brockhoff en su libro Die Welt Braucht den Westen. Al igual que Internet, el mundo no es un lugar en el que florezca la democracia. El tribalismo sigue siendo una fuerza poderosa, incluso en democracias establecidas. Un mercado más libre no tiene por qué conducir a una sociedad más libre; el capitalismo y la tecnología son tan compatibles con el autoritarismo como con la democracia.
Y, sin embargo, la democracia continúa siendo hoy una idea tan poderosa que incluso en China saca a la gente a la calle. Sí, las democracias también pueden fallar si no son eficaces. Pero no están predeterminadas para fracasar. Si queremos que la libertad y la democracia tengan futuro, tendremos que trabajar para asegurarnos de que las nuevas tecnologías reflejen y apoyen esos valores. También tendremos que trabajar para sostener la libertad y la democracia dentro de nuestras propias sociedades. Porque como deberíamos haber aprendido de la Polonia de 1989, un futuro mejor es posible, pero no es fácil ni está garantizado.

lunes, 2 de julio de 2018


FERNÁNDEZ CHACÓN, 
EL CANDIDATO SOCIALISTA A LA ALCALDÍA  DE LIMA

Enrique Fernández Chacón, ex diputado socialista, obrero y líder del movimiento Uníos, es el candidato del Frente Amplio a la alcaldía de Lima. La autoridad electoral del distrito aceptó oficialmente hoy lunes 2 de julio su candidatura mediante resolución publicada en El Peruano.
Fernández Chacón representa una opción radicalmente distinta a la del resto de postulantes al sillón municipal de Lima por su filiación socialista y democrática, de plena identificación con los sectores populares, y ajena por completo a cualquier partido comprometido con la corrupción que indigna hoy a todos los peruanos.
Limeño de 75 años, realizó estudios primarios y secundarios en escuelas fiscales y colegios nacionales. En 1965, a los 23 años, empezó a trabajar como obrero en la planta de ensamblaje de General Motors. De esta época también datan los inicios de su labor sindical mediante la que ejercía la defensa del derecho al trabajo y de mejores condiciones de vida para los trabajadores.
La actividad sindical lo llevó a la militancia política en las filas del Frente de Izquierda Revolucionaria (FIR) y luego en el Partido Socialista de los Trabajadores (PST). Tanto el FIR como el PST eran de filiación trotskista, una corriente socialista que con gran valentía denunció desde la izquierda la degeneración de los ideales del socialismo por el estalinismo y el maoísmo cuando éstos eran movimientos hegemónicos.
Tras el cierre de la General Motors en Lima, Fernández Chacón pasó a trabajar en 1971 a la planta de Motor Perú (Volkswagen), donde fue elegido secretario general del sindicato de trabajadores. Desde esta posición alertó a la clase trabajadora a prepararse para enfrentar a una corriente de derecha dentro de las Fuerzas Armadas que derrocaría al gobierno de Velasco, pero su advertencia no fue escuchada. El gobierno de la “Segunda Fase”, encabezado por Morales Bermúdez, lo confinó en prisión.
Fernández Chacón tuvo destacada participación en la organización del histórico paro nacional del 19 de julio de 1977 que, a criterio de varios historiadores, le dio la estocada de muerte a la dictadura militar, obligándola a convocar a una Asamblea Constituyente para 1978, preparando así su retiro del poder. En represalia por el paro del 19 de julio, la dictadura ordenó los despidos de más de cinco mil trabajadores, la mayoría de ellos obreros sindicalistas.
En las elecciones para la Asamblea Constituyente de 1978, Fernández Chacón fue elegido diputado por el Frente Obrero, Campesino, Estudiantil y Popular (FOCEP), liderado por Hugo Blanco, cuya alta votación convirtió a la izquierda socialista en la tercera fuerza política del país, después del APRA y del PPC. Dos años después, para las elecciones generales de 1980, integró la plancha presidencial del Frente de Trabajadores al Poder con Hugo Blanco y Ricardo Napurí.
Obrero jubilado que recibe una magra pensión de 415 soles, Fernández Chacón se mantiene firme en sus principios socialistas mediante el proselitismo y la docencia política en el movimiento Uníos, el cual forma parte del Frente Amplio. Desde hace trece años edita el mensuario Pueblo Indio, en el cual Hugo Blanco, otro inquebrantable luchador social, oficia como director.
En las elecciones generales del 2016, el Frente Amplio obtuvo la tercera más alta votación del país, quedando a un paso de llegar a la segunda vuelta para disputar la presidencia del Perú. Tras una breve etapa de crisis que dividió su ancha bancada parlamentaria, el frente ha recompuesto sus cuadros y ahora se alista a disputar regiones y alcaldías a la derecha y a los advenedizos de sus mismas filas pero que van con distintas etiquetas.
En Lima, la izquierda socialista del Perú tiene en Enrique Fernández Chacón su digno representante.

martes, 22 de julio de 2014

¿Humala sacrifica a Cornejo para salvar a Solórzano?


Cabeza del premier sería un presente griego para la oposición parlamentaria que en estos días pugna por ganar la presidencia del Congreso

 
Ventura Zeta | Lima, 22 de julio del 2014
Con la destitución de René Cornejo de la presidencia del Consejo de Ministros, reclamada por el congresista Víctor Andrés García Belaunde, el gobierno del presidente Ollanta Humala espera debilitar a la oposición parlamentaria cuya amplia y creciente concertación amenaza por primera vez desplazar al oficialismo de la presidencia del Congreso de la República.

La decisión presidencial podría dar lugar a que la bancada de García Belande (Acción Popular-Frente Amplio) no se sume a la amplia concertación opositora que postula la candidatura de Javier Bedoya de Vivanco a la presidencia del Congreso.

En realidad, la situación de Cornejo era insostenible desde que fuera denunciado por conflicto de intereses por García Belaunde. Tras presentar y hacer públicas las pruebas irrefutables del conflicto de intereses del "caso Helios", el congresista planteó la interpelación del premier.

Pero el último domingo el caso cobró un nuevo giro. El programa Cuarto Poder de América Televisión presentó un video que mostraba a un asesor de Cornejo sobornando con dinero a un ex funcionario público con el fin de que reuniera “pruebas” para tramar una "denuncia" contra García Belaunde.

“Esto es una típica práctica montesinista”, clamó el congresista de Acción Popular-Frente Amplio después de la transmisión del video, y esbozó la hipótesis de que detrás de ese complot estaba el premier Cornejo. Al día siguiente, el premier anunció la destitución de su asesor como prueba de su inocencia en el caso.

Como telón de fondo, desde antes del affaire dominical Cornejo-García Belaunde, en el Congreso de la República ganaba terreno el encuentro y la concertación de las bancadas opositoras para desplazar al oficialismo de la presidencia de la próxima mesa directiva que debe elegirse el sábado 26 de esta semana.

Las posibilidades de la oposición de ganar la presidencia del Congreso crecieron con el resquebrajamiento de la bancada oficialista (Gana Perú), en la que un sector se negó a aceptar la imposición por parte de la primera dama Nadine Heredia de la candidatura de la congresista Ana Solórzano porque –alegó– no califica para el cargo.

Por primera vez la oposición había conseguido sumar un amplio espectro de bancadas, de diferentes tendencias. A esta concertación solo se han mostrado reticentes las bancadas de Perú Posible (socia del oficialismo) y Acción Popular-Frente Amplio, caracterizada por su eclecticismo frente al gobierno.

Se sabe de la buena relación entre el presidente Humala y García Belaunde. Aún se recuerda cuando éste visitó al mandatario en privado después de su elección como presidente de una comisión que investigaría al ex presidente Alan García, líder de la oposición al actual gobierno. La revelación de este encuentro obligó a García Belaunde a renunciar a la presidencia de la comisión investigadora.

En todo caso este sábado, en la elección parlamentaria, recién se sabrá si la bancada de García Belaunde no solo aceptó la cabeza del premier como una reparación, sino también a cambio de mantener al oficialismo en la presidencia del Congreso.

 

jueves, 10 de julio de 2014

Aletazos y picotazos entre los aliados de Villarán


Lista reeleccionista de la alcaldesa, sostenida por Humala y Toledo, fue elaborada por las cúpulas partidarias, entre gallos y medianoche


Información | Medios | 10 de julio del 2014 | Foto: Exitosa

(Exitosa).- El dirigente de Perú Posible, Juan Sheput (en la foto), dijo no sentirse orgulloso por los “cuestionados” militantes de su partido que integran la lista de regidores en la campaña de reelección de Susana Villarán. 

“Es un mal negocio para Perú Posible, porque las personas que van como regidores desde mi punto de vista personal no son los cuadros más representativos del partido. Son personas cuestionadas, no me siento orgulloso de las personas que están yendo. No es posible que en una agrupación, habiendo cuadros de primer nivel, se escoja a ‘amigotes’ de la cúpula, específicamente Luis Thais y todos los dirigentes”, refirió en radio Exitosa.

En este sentido, Sheput dijo tenerle sin cuidado si recibe represalias por estas declaraciones. “Seguimos la costumbre aprista que obedece a un estilo de partido de inicios del siglo XX en el cual hay que ser fraternales, pero hoy en un mundo de redes sociales y militancias activas las disputas se hacen públicas y eso fortalece la democracia”, puntualizó.

“¿Qué van a hacer? ¿Me sacarán por defender la dignidad y moral de mi partido? Pues que me separen por eso”, añadió.

Asimismo, indicó que “nadie sabía” de los once militantes de Perú Posible que forman la referida lista, puesto que no fueron designados en elecciones internas. “Son parte de un pacto entre la cúpula y Villarán”, sentenció.

PP: solo es una alianza programática

(La República).- El secretario general de Perú Posible, Luis Thais, rechazó que tengan una alianza electoral con la alcaldesa de Lima, Susana Villarán, y dijo que solo se trata de una "política programática".

"Nosotros tenemos una alianza política programática  en la cual nosotros nos comprometemos a apoyar a Susana. Vamos a promover el voto cruzado", dijo Thais al explicar que en 18 distritos han presentado candidatos que van con el logo chakano. También señaló que ellos están colaborando con la propuesta de gobierno. En la lista para la reelección de la burgomaestre hay diez candidatos a regidores de PP.

Además, a pesar de las críticas contra la ex candidata a la Defensoría del Pueblo, Pilar Freitas, defendió su postulación y aseguró que no debilitará la candidatura de Villarán.

El candidato a teniente alcalde por Diálogo Vecinal, Augusto Rey, aclaró que la alcaldesa no propuso su postulación, sino que fue un acuerdo interno en Perú Posible.

En tanto, la agrupación Ciudadanos por el Cambio, que lidera el ex premier Salomón Lerner Ghitis, criticó la inclusión de Freitas en la lista al recordar los cuestionamientos a su candidatura a la Defensoría del Pueblo en la llamada 'repartija'.

Una derrota anunciada

(Hechos & argumentos).- La lista de la alcaldesa Susana Villarán, quien postula a la reelección al sillón municipal de Lima, la capital del Perú, está integrada por militantes del partido de gobierno (Partido Nacionalista) y de Perú Posible, y se dice que su campaña contaría con financiamiento de empresarios constructores locales y brasileños.

Villarán pertenece a una pequeña organización seudoizquierdista denominada paradójicamente Fuerza Social pese a su carencia de arraigo en el pueblo, por lo cual no ha conseguido reconocimiento legal.

A fines del año pasado Villarán se salvó por un pelo de un proceso electoral de revocatoria que barrió del municipio al 90 % de regidores de su filiación. A manera de mea culpa por su criticada ineficiencia en la gestión edil, prometió al pueblo de Lima no intentar una reelección al municipio capitalino.

Pero incumplió su promesa y, para inscribir esta vez su candidatura, negoció con el partido del presidente Ollanta Humala (PN) y del ex presidente Alejandro Toledo (PP) a puerta cerrada, sin consultar ni rendir cuentas a nadie, lo contrario a lo que corresponde a quien pertenece a una organización política asociada con terceros.

Para muchos observadores, la candidatura de Villarán lleva el sello de una derrota anunciada. Su gestión municipal es desaprobada por alrededor del 80% del vecindario de Lima que le critica no solo su ineficiencia, sino haber frenado el proceso de recuperación de la capital que llevaron adelante sus dos anteriores alcaldes: Alberto Andrade y Luis Castañeda.
Asimismo, su notaria incapacidad comunicativa, pese a que presume de periodista profesional, no le permite llegar a la masa urbana y convencerla de su propuesta reeleccionista.

De otro lado, un sector de la izquierda peruana, que intenta reconstruirse después de su desbande desde los años 90, critica la candidatura de Villarán porque proyecta la imagen de absoluta ineptitud como característica de la izquierda, por su asociación con personajes y organizaciones muy cuestionadas, y porque le resta la posibilidad de impulsar un nuevo liderazgo, un nuevo proyecto y reinventarse.

viernes, 4 de julio de 2014

¿Cómo acortar el déficit en infraestructura?

Diálogo entre gobiernos e inversores también se referirá al papel de la Alianza del Pacífico

 
Información | 4 julio 2014
Los días 7 y 8 del presente mes se realizará en Lima la conferencia internacional “Reduciendo brechas en infraestructura a través de inversiones inteligentes”, promovida por la OCDE y Proinversión.
OCDE son las siglas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico y, de acuerdo a sus voceros, en esta reunión se promoverá el diálogo entre gobiernos y e inversores del sector de la infraestructura en América Latina para intentar respuestas a las siguientes preguntas:
 
¿Cuáles son las necesidades y las oportunidades?, ¿Qué pueden hacer los gobiernos para maximizar los beneficios económicos y el desarrollo generado por la inversión en infraestructura? ¿Qué estrategias son más útiles para facilitar la inversión?
La conferencia incluirá seis paneles interactivos enfocados en los siguientes temas:
1. La inversión en infraestructura - el nexo del desarrollo. 2. La inversión en energía - experiencias y enfoques regionales. 3. Inversión en transporte - estrategias corporativas y desafíos regulatorios. 4. Inversiones en infraestructura - ¿Qué papel tendrán los  inversores a largo plazo? 5. Facilitación de inversiones - perspectivas de la Alianza del Pacífico. 6. ¿Qué viene después?

La conferencia reunirá a funcionarios públicos, expertos internacionales, representantes del sector privado y de la sociedad civil.
La cuarta reunión de la Iniciativa para la Inversión en América Latina y el Caribe-OCDE será resultado de la colaboración entre la OCDE y ProInversión, la agencia peruana de promoción de la inversión privada.

miércoles, 2 de julio de 2014

Urresti dirigió brigada militar que asesinó a periodista Hugo Bustíos


Excéntrico ministro del Interior es procesado por crimen ocurrido en noviembre de 1988 en Ayacucho
 


Información | El Comercio.pe | 2 de julio de 2014
Nueve días después de jurar como ministro del Interior, Daniel Urresti afronta su primera denuncia. Según informó Ideeleradio, el general de brigada del Ejército en retiro es procesado en el Poder Judicial como presunto autor mediato del asesinato del periodista Hugo Bustíos, ocurrido el 24 de noviembre de 1988, cuando era el jefe de la Sección de Inteligencia S-2 en Ayacucho.

De acuerdo al programa “No hay derecho”, en el expediente 01145-2013-0-0501-JR-PE-02 de junio del 2013 se comprende a Urresti como imputado en el supuesto delito contra la vida, el cuerpo y la salud, en la modalidad de asesinato.

Este documento ha sido elevado a la Sala Penal para que esta instancia evalúa si se inicia o no un juicio oral contra el titular del Mininter o si el caso se archiva.

Urresti, quien antes se desempeñó como Alto Comisionado en Asuntos de Formalización Minera, es investigado judicialmente desde junio del 2013.

La acusación fiscal

 La Fiscalía señala en su denuncia, que fue acogida por el juez Bladimiro Chuquimbalqui Maslucán, que los periodistas Hugo Bustíos Saavedra, corresponsal de la revista “Caretas” y su colega Eduardo Rojas Arce se dirigieron a Quinrapa (cercanías de Huanta, Ayacucho) a investigar el crimen de Primitiva Jorge Silca y de su hijo Gregorio por terroristas de Sendero Luminoso, tras recibir la autorización verbal del entonces jefe Político Militar de Huanta, Víctor La Vera Hernández.

“Siendo aproximadamente las 11:30 a.m, del mismo día, en circunstancias que los dos periodistas se encontraban cerca de la vivienda de la familia asesinada, específicamente en el pago de Erapata-Quinrapa, por disposición del Jefe de Base Víctor Fernando La Vera, fueron emboscados y atacados por miembros del Ejército Peruano de la Base Militar de Castropampa”, relata el documento.

Según Ideeleradio, citando un informe de la fiscalía, la brigada que asesinó a Bustíos Saavedra estaba al mando del entonces oficial EP Daniel Belizario Urresti Elera.

Bustíos Saavedra quedó malherido y su colega Eduardo Arce corrió, logrando salvarse, “para luego los atacantes poner una carga explosiva en el cuerpo herido del periodista Bustíos Saavedra, quien murió a consecuencia de dicho ataque.

La fiscalía señala que “se ha logrado acopiar los elementos probatorios que acreditan la participación Urresti Elera, en su calidad de S-2 Inteligencia de la Base Contrasubversiva de Castropampa de la provincia de Huanta, el 24 de noviembre de 1988, y como tal uno de los presuntos responsables del asesinato del periodista Hugo Bustíos Saavedra y de la tentativa de asesinato del periodista Eduardo Yeni Rojas Arce”.

Fuentes del Ministerio del Interior señalaron a El Comercio que Urresti está sorprendido con esta denuncia y que luego de participar en el Consejo de Ministros, responderá a esta información.

El dato

 La Segunda Sala Penal Transitoria de la Corte Suprema, presidida por el doctor Javier Villa Stein, ratificó en setiembre del 2008 la condena de 17 y 15 años de cárcel al coronel EP (r) Víctor Fernando La Vera Hernández y al teniente coronel EP (r) Amador Armando Vidal Sambento, por este caso. No obstante, el tribunal que dictó la pena, en su momento, pidió remitir copias certificadas para que se determine la presunta responsabilidad de otras personas.

jueves, 19 de junio de 2014

INVESTIGARÁN APORTES DE MINERÍA ILEGAL AL PARTIDO DE GOBIERNO

Así lo dispuso el fiscal de la Nación Carlos Ramos Heredia, primo de la primera dama Nadine Heredia. Entre tanto, Ulises Humala "limpia" a su hermano, el presidente Ollanta Humala

 
Informe | "Correo" de Lima | 19 de junio de 2014
El dinero que habría recibido el Partido Nacionalista de parte de mineros ilegales como aporte a la campaña de Ollanta Humala el año 2011 ha puesto a algunos integrantes del Gobierno en la mira del Ministerio Público.

Ayer, el fiscal de la Nación, Carlos Ramos Heredia, anunció que su despacho ya investiga el financiamiento que se habría realizado a favor del Partido Nacionalista.

Un diario local difundió una fotografía de 2010 (ver gráfico en parte superior de este texto), en la que aparece Humala con los mineros ilegales que revelaron el aporte. De acuerdo con la versión de una de las personas que aparece en la imagen -según el diario- la foto la tomó Nadine Heredia, actualmente presidenta del Partido Nacionalista, quien estaría comprometida en el tema, según miembros de la Comisión de Fiscalización del Congreso.

LOS ANTECEDENTES. Según Teódulo Medina, expresidente de Federación Nacional de Mineros Artesanales del Perú (Fenamarpe), en el 2011 le entregó al congresista Daniel Abugattás 900 mil soles en efectivo, además de 17 kilos de oro al partido de Gobierno.

Los dirigentes mineros han mostrado también un papel firmado por Abugattás en el que este reconoce una contribución de 49 mil dólares.

Además, otros aportes de la minería ilegal habrían llegado al nacionalismo a través del área de Tesorería, a cargo de Ilan Heredia, hermano de la primera dama Nadine Heredia.

Según el fiscal Ramos Heredia, el órgano que dirige está indagando cuándo se realizó la supuesta entrega de dinero.

"Mi despacho ha iniciado ya una investigación y próximamente se está evaluando si, en dos o tres días, se inician otras investigaciones", anotó.

En conferencia de prensa, el fiscal de la Nación indicó que actualmente se dedican al análisis de las estrategias que se aplicarán en este caso, por lo que no hay un plazo determinado.

"Se evalúan los hechos concretos para recoger indicios o evidencias objetivas respecto a supuestos aportes de la minería ilegal", dijo.

No hay nombres. Asimismo, Ramos Heredia agregó que de acuerdo al nivel del funcionario, se determinará quién será o no incluido en las investigaciones.

Ramos Heredia no precisó si la investigación se inició de oficio o a partir de alguna denuncia.

Como se recuerda, el congresista Abugattás señaló que el tema tenía visos de extorsión y por ello puso el caso en manos de la Fiscalía de la Nación.

Asimismo, el ciudadano Carlos Huerta Escate presentó una denuncia contra los nacionalistas que resulten responsables por este caso ante el Ministerio Público.

COMPETENCIA. Según supo Correo, una vez calificados los hechos, el caso podría ser derivado a las fiscalías de Lavado de Activo y Pérdida de Dominio.

Esto siempre que se determine que los presuntos aportes se habrían dado durante la campaña del 2006, es decir, cuando Humala Tasso no logró ser electo Presidente.

De lo contrario, si los aportes se dieron para la campaña del 2011, sería visto por el despacho de Ramos Heredia.

De darse esta última posibilidad, Ramos Heredia no podría llevar el caso, pues habría un conflicto de interés debido a que es familiar de la primera dama, Nadine Heredia, y del hermano de esta, Ilan Heredia.

HABLA ULISES.- Ulises Humala, hermano del presidente Ollanta Humala, consideró que su hermano sí recibió aportes de los mineros ilegales y criticó al gobierno por ahora "tratarlos como delincuentes".

"Creo que sí apoyaron la campaña de mi hermano. En las zonas donde predominaba la minería informal el Partido Nacionalista Peruano (PNP) tuvo una alta votación. Creo que la Gran Transformación calaba con los mineros informales. Creo que tratarlos como delincuentes es injusto", dijo Ulises a una televisora local.

El mayor de los hermanos Humala criticó al congresista Daniel Abugattás y deslizó la posibilidad de que él se habría quedado con los 900 mil soles y los 17 lingotes de oro que los mineros ilegales aseguran haber aportado a la campaña presidencial de Ollanta Humala que nunca ingresaron a las cuentas del partido y que, por lo tanto, no fueron reportados a la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE).

"Estos 49 mil dólares que aparecen con la firma de Abugattás más los 900 mil soles que dicen que dieron y los 17 lingotes de oro no aparecen en las cuentas que el PNP dio a la ONPE. Entonces alguien tiene que haber guardado ese dinero en alguna parte y todo hace pensar que es quien recibió el dinero. La posibilidad es que él no lo haya comunicado al partido", refirió.

Bajo esa línea, explicó que "no le cree a Abugattás". "Él nos tiene acostumbraos a este tipo de comportamientos. A comienzos del gobierno de Alan Garcia comenzó a circular un pedido para amnistiar a Antauro, y Abugattás firmó, pero luego retiró su firma. Abugattás no tiene palabra", consideró.

Nadine no es responsable. Inquirido sobre quién es responsable político de estas aportaciones, el hermano del presidente consideró que quien debe dar cuenta de esto es el hermano de la primera dama Nadine Heredia, Illan Heredia, porque este fue tesorero del partido nacionalista.

"Nadine no tiene responsabilidad directa porque no era presidenta. El que debe tener mayor conocimiento de causa es su hermano, que era el tesorero del PNP, y Abugattas debe ser investigado por el Congreso. Él ha puesto la denuncia contra los mineros pero ellos han sacado un audio donde reconoce el aporte de los mineros", puntualizó.

miércoles, 4 de junio de 2014

IZQUIERDA Y DERECHA CONTRA LIMA


El proyecto reeleccionista de Villarán junta a tendencias opuestas que se hacen de la vista gorda ante la corrupción de algunos de sus socios.

 
Juan Carlos Lázaro | Opinión | Lima, 4 de junio del 2014

Tras una desastrosa gestión edil, a la cual solo sus minúsculas huestes le reconocen virtudes y aciertos, la actual alcaldesa de Lima mueve sus fichas en vista a la reelección municipal, juntando para el caso a izquierdas y derechas.

Con ella Lima ha vuelto a ser ese espacio negro del comercio ambulatorio sucio y depredador, más insegura que nunca, y cuyo centro histórico (que empezaba a recuperarse notablemente a partir de la gestión de Alberto Andrade en los años 90) languidece como testimonio de la ignorancia y la ineficiencia en gestión edil.

Gran parte del tiempo de Villarán en el municipio lo desperdició en desmontar muchas de las obras del alcalde anterior, hasta convertirlas en factorías inútiles y casi abandonadas como los tan necesarios hospitales de la solidaridad.

Pero los seguidores de Villarán suelen decir que nadie como ella enfrentó a las mafias del transporte que congestionan Lima. ¿Será cierto? El hecho es que Lima, en este ámbito, sigue tan caótica como antes, con más accidentes vehiculares, y con transportistas que siguen haciendo de las suyas, impunemente.

Si en algo ha cambiado en la última década el transporte de pasajeros, a favor de sus usuarios, ha sido por la puesta en marcha de dos obras de primera importancia: el Tren Eléctrico y el servicio de ómnibus denominado Metropolitano. Ninguna de las dos le debe nada a la alcaldesa.

Para la mayoría de los casi 10 millones de vecinos de Lima, ya sean de sectores acomodados, medios o periféricos, la imagen de Villarán es negativa. Las encuestas de opinión entre los habitantes de la capital la desaprueban con algo más del 80%.

Villarán lidera una minúscula agrupación de seudoizquierda denominada paradójicamente Fuerza Social, la cual carece de reconocimiento legal por falta de respaldo popular. La secundan, en su afán reeleccionista, otras agrupaciones del mismo signo que la suya, sin reconocimiento, excepto una surgida en el campo: Tierra y Dignidad.

Tierra y Dignidad, en actitud moral que la enaltece, discrepa del propósito de Villarán y de parte de sus seguidores de formar alianza con el derechista Perú Posible, liderado por el ex presidente Alejandro Toledo, a quien se sigue proceso por un escandaloso caso de supuesto lavado de activos y de asociación ilícita para delinquir.

Pero tras bastidores, el proyecto reeleccionista de Villarán también tendría el respaldo de poderosas firmas constructoras transnacionales, contratadas por el municipio para la ejecución de una obra faraónica de dudosa utilidad, que busca extender sus beneficios más allá de este 2014.

¿Podrá esta desnaturalizada coalición de izquierda y derecha torcer la actual tendencia de rechazo a la gestión de Villarán de la mayoría del pueblo de Lima?

miércoles, 28 de mayo de 2014

Zizek: Comienza una era de peligro, con varias potencias


Según el filósofo eslovenio, la era estadounidense terminó y ahora existen múltiples centros de capitalismo global que conviven en tensión. “Cayó el Muro pero surgen muros por todas partes”, sostiene.



Slavoj Zizek | Opinión | ©The New York Times | 28, mayo, 2014

Conocer a una sociedad no es conocer sólo sus reglas explícitas. También hay que saber cómo aplicarlas: cuándo utilizarlas, cuándo violarlas, cuándo desechar una alternativa, y cuándo en realidad estamos obligados a hacer algo pero tenemos que fingir que lo hacemos libremente. Consideremos la paradoja, por ejemplo, de los ofrecimientos hechos para que se rechacen. Cuando un tío mío rico me invita a un restaurante, los dos sabemos que él pagará la cuenta, pero de todos modos yo tengo que insistir un poco en que la compartamos: imagínense mi sorpresa si mi tío simplemente dijera: “Bueno, OK, pagála vos”.

Durante los caóticos años post-soviéticos del gobierno de Yeltsin en Rusia hubo un problema similar. Aunque las reglas legales se conocían, y en gran medida eran las mismas que bajo la Unión Soviética, la compleja trama de reglas implícitas, no escritas, que sostenían todo el edificio social, se desintegraron. En la Unión Soviética, si querías una mejor atención hospitalaria, digamos, o un departamento nuevo, si tenías una queja contra las autoridades, si te citaban en los tribunales o querías que tu hijo o hija fueran aceptados en una escuela del mejor nivel, conocías las reglas tácitas. Sabías a quién tenías que dirigirte o coimear, qué podías hacer y qué no. Después del derrumbe del poder soviético, uno de los aspectos más frustrantes de la vida cotidiana para la gente común fue que estas reglas tácitas se volvieron seriamente difusas. La gente sencillamente no sabía cómo reaccionar, cómo vincularse con las disposiciones legales explícitas, qué se podía pasar por alto y dónde funcionaba la coima. (Una de las funciones del crimen organizado fue proporcionar una especie de legalidad sustituta. Si tenías un pequeño negocio y un cliente te debía dinero, llamabas a tu protector de la mafia, que se ocupaba del asunto ya que el sistema legal del estado era ineficaz.) La estabilización de la sociedad bajo el reinado de Putin se debió mayormente al restablecimiento de la transparencia de las normas no escritas. Ahora, otra vez, gran parte de la gente vuelve a entender la compleja telaraña de las interacciones sociales.

En política internacional todavía no hemos llegado a esta etapa. Durante la década de 1990 un pacto no hablado regulaba la relación entre las grandes potencias occidentales y Rusia. Las naciones occidentales trataban a Rusia como una gran potencia, a condición de que Rusia no actuara como tal. ¿Pero qué ocurre si la persona a la que se le hace el ofrecimiento para que lo rechace en realidad lo acepta? ¿Qué ocurre si Rusia empieza a actuar como una gran potencia? Una situación así es verdaderamente catastrófica, una amenaza para todo el tejido de relaciones existente: como pasó hace cinco años en Georgia. Cansada de que sólo la trataran como a una superpotencia, Rusia actuó realmente como tal.

¿Cómo se llegó a esto? El siglo estadounidense terminó, y hemos entrado en un período en el cual se han ido formando múltiples centros de capitalismo global. En EE.UU., Europa, China y tal vez América Latina, también, los sistemas capitalistas se han desarrollado con orientaciones específicas: EE.UU. apoya el capitalismo neoliberal, Europa lo que queda del Estado de Bienestar, China al capitalismo autoritario, América Latina al capitalismo populista. Luego de que fracasara el intento de EE.UU. de imponerse como única superpotencia –el policía universal– se da ahora la necesidad de establecer las reglas de interacción entre estos centros locales en lo que hace a sus intereses en conflicto.

Es por esto que nuestra época es potencialmente más peligrosa de lo que puede parecer. Durante la Guerra Fría, las reglas de comportamiento internacional estaban claras, garantizadas por la locura –destrucción mutuamente asegurada– de las superpotencias. Cuando la Unión Soviética violó estas reglas no escritas al invadir Afganistán, pagó cara su transgresión. La guerra de Afganistán fue el comienzo de su fin. Hoy, las nuevas y las viejas superpotencias se están probando unas a otras, tratando de imponer su visión propia de las reglas globales, experimentando con ellas a través de sustitutos, que, por supuesto, son otras naciones y estados más chicos.

Karl Popper elogió cierta vez las pruebas científicas de las hipótesis, diciendo que, de ese modo, permitimos que nuestras hipótesis mueran en lugar nuestro. En las pruebas de hoy, los países chicos se lastiman y hieren en lugar de los grandes: primero Georgia, hoy Ucrania. Pese a que las argumentaciones oficiales son altamente morales y giran en torno a los derechos humanos y las libertades, la naturaleza del asunto queda clara. Los acontecimientos de Ucrania parecen algo similar a una segunda parte de la crisis de Georgia: la etapa siguiente de una lucha geopolítica por el control en un mundo desregulado y multicéntrico.

Definitivamente es momento de enseñar algunos modales a las superpotencias, viejas y nuevas, ¿pero quién lo va a hacer? Obviamente, sólo una entidad transnacional puede hacerse cargo: más de 200 años atrás, Immanuel Kant vio la necesidad de un orden legal transnacional basado en el surgimiento de la sociedad global. En su proyecto en procura de la paz perfecta escribió: “Dado que, más estrecha o más amplia, la comunidad de los pueblos de la Tierra se ha desarrollado tanto que una violación de derechos en un lugar se percibe en todo el mundo, la idea de una ley de ciudadanía mundial no es un concepto pretensioso ni exagerado.” Esto, sin embargo, nos lleva a lo que tal vez sea la “principal contradicción” del nuevo orden mundial (si podemos usar el viejo término maoísta): la imposibilidad de crear un orden político global que se corresponda con la economía capitalista global. ¿Qué pasa si, por razones estructurales, y no sólo debidas a limitaciones empíricas, no puede haber una democracia de alcance mundial o un gobierno mundial representativo? ¿Qué pasa si la economía de mercado global no se puede organizar directamente como una democracia liberal global con elecciones mundiales?

Hoy, en nuestra era de la globalización, pagamos el precio de esta “contradicción principal”. En política, las fijaciones de vieja data y las identidades culturales particulares, religiosas y étnicas sustanciales, han regresado con gran fuerza. Nuestro trance está definido hoy por esta tensión: la libre circulación global de commodities está acompañada por crecientes separaciones en la esfera social. Desde la caída del Muro de Berlín y el surgimiento del mercado global han empezado a surgir nuevos muros por todas partes, que separan pueblos y culturas. Tal vez la propia supervivencia de la humanidad dependa de resolver esta tensión. (Traducción: Román García Azcárate).